miércoles, 4 de junio de 2008

Ediciones herméticas


Un tema de capital importancia para los estudios en el entorno académico de los textos herméticos, es una adecuada edición crítica de los mismos. En España, la primera edición "crítica" fue la denominada Tres tratados: Poimandres, La llave, Asclepios (1980), a cargo de Francisco Samaranch Kirner, un hombre dedicado de forma intermitente al estudio de la Historia de Hermetismo tardoantiguo. Su edición de los textos herméticos, si bien ahora mismo se nos antoja anticuada y con un aparato crítico muy raquítico, puede que iniciara cierta chispa de interés académico en nuestro país sobre el fenómeno hermético.

Además, la tesis de este señor creo que constituyó en su día un vigoroso respaldo a lo que Renau Nebot llama con buen criterio "segunda época" de los estudios sobre hermetismo (tardoantiguo); en general, la época en la que la interpretación del hermetismo alejandrino daría un pequeño giro copernicano, con la publicación de los textos de Nag Hammadi. Pues bien, la tesis, titulada Elementos egipcios en el corpus hermeticum (1970), por desgracia sólo parcialmente publicada, tuvo cierta resonancia internacional, como lo demuestra este comentario de Alberto Camplani, citado por el propio Sr. Samaranch en su última obra publicada sobre estas cuestiones, Filosofía y teúrgia (1999):
"É solo a partire dal 1970, con la dissertazione di Samaranch Kirner, che questa corrente di studi si apre ad una riflessione più ampia sul rapporto tra ellenismo e cultura egiziana" (Ermetismo ed Egitto: limiti di un'eredità, 1996).
Francisco Samaranch Kirner ha publicado otros trabajos sobre hermetismo tardoantiguo: "Sobre algunas encrucijadas del pensamiento helenístico: el hermetismo" (1987) y "La cara egipcia de los logoi hermeticos" (1988). Estos ensayos fueron concebidos de alguna manera, junto con la citada obra Filosofía y Teúrgia, como "revisiones" periódicas de la ya antigua tesis doctoral. Los dos ensayos citados de los años 87-88, vienen a cuento debido a la publicación de las ya clásicas obras Hermès en Haute-Égypte (1978-82) y The egyptian Hermes (1986), de Jean-Pierre Mahé y Garth Fowden respectivamente.

Pero esta no fue la primera edición (crítica o no) de algunos de los textos herméticos tardoantiguos en nuestro idioma. José Rodríguez deja constancia en su artículo "La Alquimia en España durante el Período Modernista a través de sus Libros", p. 213, de una olvidada traducción de Pedro Guirao de 1928. Además, la página de la Bibliotheca Philosophica Hermetica nos remite a otra muchísima más antigua (no publicada): A very early Spanish translation by Diego Guillen, 1485 (Escorialensis cast. b.IV.29; cf Kristeller SF II, p.cxxx), sobre la base del texto de Ficino.

En fin, la publicación de la imprescindible edición de los textos herméticos de Nock y Festugière, supuso la imposición de una vara de medida muy exigente a la hora de emprender cualquier clase de acercamiento académico, bajo la forma de edición crítica, de los textos. Actualmente, en nuestro país las ediciones críticas de los textos herméticos son excelentes: la colección de textos clásicos de Gredos publicó en su día la tesis doctoral de Xavier Renau Nebot, en una edición que a mí me parece sobresaliente. Asimismo, Antonio Piñero, junto con Montserrat Torrents y García Bazán, han editado críticamente con mayor extensión los textos herméticos de Nag Hammadi.

Sobre las abundantes ediciones acríticas de los textos herméticos hablaré otro día. No obstante, sí que diré que me llamó mucho la atención en su momento la pequeña introducción española a una edición del Corpus y el Asclepio, con un buen estudio preliminar y notas de Brian Copenhaver; por lo que pude entender, ridiculizaban la labor historiográfica desplegada en la edición de los textos, y hacían una más que curiosa dedicatoria, que parecía destinada a "iniciados" o algo así; este tipo de comentarios, me recordó al peculiar diccionario (por otro lado, muy bonito) de Ana María Vázquez Hoys; me refiero al Arcana mágica: diccionario de símbolos y términos mágicos, publicado por la UNED en 2003, y que tras un esotérico guiño en sus primeras páginas, incluye una más que curiosa definición en la entrada correspondiente a "Hermetismo"... Creo que, hoy por hoy, queda muchísimo por hacer en España para la revalorización académica de la Historia del Hermetismo, y la verdad, no me gusta demasiado la idea de que no haya una buena bibliografía en nuestro idioma sobre el tema.

Por otro lado, ayer mismo pedí la voluminosa y carísima obra Hermetism from late antiquity to humanism, mediante préstamo interbibliotecario a la Facultad de Teología de Granada, lo que supondrá unos ocho eurazos, pero lo que supondrá también el acabar de una vez con una obsesión que ya dura demasiado. Desde que supe de ella hace años, como ganadora del Premio al Libro del Año otorgado por Azogue, y fallado en 2004, no se me ha quitado de la cabeza. Al fin y al cabo, profundizar en esa visión totalizadora del fenómeno hermético, llevada a cabo nada menos que por los mejores especialistas sobre la cuestión, es algo muy importante para continuar con mis estudios herméticos. Por fin (o eso espero), en unos días podré contemplarla, quitándole un tiempo preciado a los dichosos exámenes.

Queda actualizada la sección dedicada al "Hermetismo técnico", sección en la que pretendo iniciar una recopilación de textos herméticos dotados de aparato crítico, basándome en el proyecto Hermes Latinus, y las conocidas obras de hermetismo técnico tardoantiguas estudiadas ampliamente por Festugière en su Révélation, etc. Espero continuar ampliando esta sección lo mejor que pueda. No resulta fácil enfrentarse a este aspecto del hermetismo con cierto rigor, y además la enorme avalancha de informaciones contradictorias y la elevada especialización técnica de la materia, hacen bastante "delicado" cualquier acercamiento mínimamente riguroso.

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